Cada alumno ha elegido un árbol para que sea su amigo, lo ha tocado, medido, investigado su nombre, lo ha dibujado, ha cogido una muestra de sus hojas, fotografiado y le ha hecho un cartel para colgárselo. Ese niño lo cuidará durante su estancia en el centro, lo regará, le quitará el cesped de alrededor, le hablará y verá como va creciendo con él. Esto lo harán cuando entren en el cole con 3 añitos y será su protector en los tres años que esté en el centro, traspasando su cuidado cuando esté en 5 años a otro niño de 3 años. Pero no dejará de ser su amigo, podrá venir siempre que quiera a verlo al cole. Se creará un vínculo especial entre ambos y eso le hará amar a la naturaleza, a sus árboles y plantas. Es una manera de acercar a los niños al cuidado del medio ambiente de manera natural.




















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